jueves, 16 de julio de 2015

Conocer Venecia, según los días disponibles

Después de lo que hay que ver en Italia según la cantidad de días (un intento por poner orden a lo mucho que hay que ver en éste país a través de rutas e itinerarios), lo que sigue es indagar en detalle sobre una de las ciudades por las que muchos piensan para empezar a conocer este país. Está claro que Venecia es un destino que muchos soñamos como un primer contacto. En mi caso, fue el segundo destino italiano que pude conocer después de Roma. En aquellos dos días en Venecia, no sólo pude caminar y hasta conocer otras islas de Venecia, sino sobre todo, entender que es lo que me hubiese gustado leer antes de llegar a la ciudad, para organizar del mejor modo mi visita en una ecuación razonable entre “cosas que ver” y tiempo disponible.

Venecia en un día.

Lo primero: entender que Venecia en un día no es la opción recomendada para una visión completa, aunque servirá al menos para un panorama de la ciudad. Si bien Venecia es una ciudad pequeña, y que hasta se puede caminar de un modo razonablemente completo en un día, en cambio hay mucho por ver puertas adentro (museos, construcciones históricas, palacios, infinidad de iglesias), además de otras islas y excursiones fuera de la isla principal. Por ello es que no voy a profundizar tanto sobre un día en la ciudad, más que recomendar caminar en torno a la Plaza de San Marcos, desviarnos por el Gran Canal y ver el “tráfico” flotante, sumergirnos en la atmósfera de la ciudad. También nos sucederá que terminaremos por perdernos en sus calles, algo que no será demasiado difícil (es la ciudad más “laberinto” que pude conocer hasta ahora). Desorientarnos será inevitable y hasta bienvenido, porque lo mejor será olvidarse de los mapas y dejar que Venecia sorprenda con lo que pueda aparecer al otro lado de cualquier pasaje. No estará completo nuestro paso sin una caminata por el puente de Rialto o una foto en el Puente de los Suspiros. El día podría incluir una visita al interior de la Basílica de San Marcos (con horarios que van desde la mañana hasta las 17 horas).

Venecia en tres días

Tres días sería la visita casi ideal para explorar de una forma razonablemente completa la ciudad. Como siempre hago en mis viajes, lo primero que recomiendo es empezar con una caminata de reconocimiento de la ciudad (ver en el punto anterior los consejos para Venecia en un día).

Día Uno

El primer día en mi caso lo prefiero distendido, y así lo recomiendo: un paseo sin itinerario fijo dejando que la ciudad nos sorprenda. De hecho es una ciudad para descubrir no sólo en sus puntos más famosos y fotografiados, sino sobre todo en aquellos rincones desolados (porque aún en una ciudad de enorme peso turístico, se pueden descubrir pasajes, o zonas que hay pocos visitantes) y donde se respiran aires “de otros tiempos”: es posible encontrar casas con ropa colgada como guirnaldas entre ventanas, o ancianos sentados viendo la vida o los turistas pasar, algo así como una Venecia más auténtica. Pero también será encantador caminar en torno al Gran Canal, rechazar ofertas de paseos en góndola (si es que no queremos alterar nuestro presupuesto), o aceptarlas, y perdernos por los canales.

A la visita a la Basílica de San Marcos, la obra maestra de influencia bizantina (preferiblemente en la mañana) podríamos sumar un ascenso a la torre del campanario, también en el corazón de Venecia en la misma Plaza de San Marcos. Desde allí tendremos una vista hacia la isla principal de Venecia (donde notaremos pronto que sobre la ciudad sobresalen cantidad de campanarios hacia todos los puntos cardinales e islas, torres de decenas de iglesias que en días siguientes iremos descubriendo caminando la ciudad). Por la noche, podríamos salir nuevamente a “perdernos” (por aquello de que la ciudad es un laberinto), hasta encontrar un restaurante con encanto junto a algún canal donde cenar.

Día Dos.

Podríamos empezar por aprovechar la mañana visitando el Palacio Ducal (abierto todos los días desde las 8:30 hasta las 16:30). Sobre la misma plaza principal que ya habremos caminado varias veces, se encuentra uno de los palacios más emblemáticos de la ciudad. La razón para visitar el Ducal es que así entenderemos la opulencia y el esplendor de los mejores tiempos de Venecia. El palacio tiene unos diez siglos de historia, fue reformado y ampliado varias veces como sede del gobierno y las magistraturas por varios siglos. En el interior podremos recorrer los espacios lujosos en donde también se exhiben obras de arte, mientras que en el exterior, notaremos como el palacio cambia de tonalidades (del rosado al blanco) según las horas del día.

Por la tarde bien podríamos salirnos por primera vez del conjunto de islas principales de la ciudad, para una visita a la isla de Murano (una de las más importantes de la laguna). Está a solo un kilómetro de la propia ciudad de Venecia, y aunque tal vez no necesite presentación, es famosa sobre todo por su artesanía en vidrio, como una marca registrada de calidad en la producción de lámparas, copas, o adornos. En realidad es otra “pequeña Venecia”, porque también son varias islas unidas por puentes y separadas por canales pequeños. En Murano hay un museo del cristal (Museo del Vetro), iglesias históricas, tiendas, y restaurantes. Todo es ideal para completar una tarde o hasta cenar allí terminando nuestro segundo día.

Día Tres.

Hasta las 19 horas tendremos tiempo de visitar la Galería de la Academia de Venecia (Gallerie dell’Accademia), nada menos que uno de las mejores colecciones de arte italiano, y una de las atracciones turísticas más recomendables de la ciudad. A través del arte podremos entender también la dimensión de la ciudad de Venecia, la historia y el poder que se asentaba en este punto del mapa.  Se exhiben obras maestras de la pintura veneciana, con autores que incluyen a Leonardo Da Vinci, Tintoretto o Tiziano, entre tantos. Por la tarde podríamos visitar la isla de Lido (donde se realiza el Festival de Cine de Venecia, con extensas playas para refrescarse en verano mirando al Adriático). Otra opción sería visitar zonas de la ciudad como el área de Dorsoduro (donde hay galerías de arte, palacios imponentes y lujosos, convertidos en museo como el Ca’ Rezzonico).

Venecia en Cinco Días.

Día Cuatro

Aquí empieza la parte que también me entusiasma, porque más allá de lo imperdible y tradicional (que ya hemos visto en los primeros tres días), se despliega una variedad de opciones y propuestas. Por ejemplo, si lo nuestro es el arte, podríamos (o deberíamos) visitar el Museo Guggenheim de Venecia, una de las mejores colecciones de arte moderno de Europa. También sería interesante abordar el perfil más curioso y a veces no tan conocido de la ciudad. En el blog ya detallamos 7 lugares curiosos que tal vez no esperarías encontrar en Venecia. Por ejemplo, fuera de las islas principales se encuentra la isla de Burano, una colección de casas de fachadas coloridas y canales que no pueden ser más encantadoras y fotogénicas. Se despliega la oportunidad de conocer la fastuosa casa de Ópera La Fenice, o llegar hasta una librería curiosa por estar preparada a prueba de inundaciones (con el acqua alta), o también escaparnos a la isla de Torcello para conocer los orígenes de Venecia.

Día Cinco.

Y aún Venecia está lleno de rincones curiosos para seguir indagando en sus detalles. Por ejemplo, el Café Florian en la misma Piazza San Marcos es el café más antiguo del mundo abierto sin interrupciones desde 1720, y bien merece hacer una pausa en algunas de nuestras caminatas. Otra sugerencia recomendada es cruzarnos hasta la isla de San Giorgio Maggiore, a unos pocos minutos al sur de las islas principales. Ocupada desde tiempos romanos, allí encontraremos las construcciones de un monasterio benedictino junto a la famosa Basílica de San Giorgio Maggiore, erigida en el año 1566. Y a riesgo de agregar días, más ideas: visitar el interior de la Basílica de Santa María dei Frari, una de las más imponentes por sus dimensiones de Venecia. O simplemente, completar algunas de las sugerencias de días anteriores que nos quedaron inconclusas. Cinco días en Venecia será una visión completa, relajada y distendida en la ciudad, casi la visita ideal recomendada.

lunes, 13 de julio de 2015

El Palacio Real de Madrid

El Palacio Real de Madrid es el monumento de patrimonio nacional más visitado.

Durante los seis primeros meses de 2015, un total de 1.474.518 personas visitaron los Reales Sitios gestionados por el Patrimonio Nacional. Estos resultados suponen un 10% más con respecto al mismo periodo del año 2014, con un aumento de 133.519 visitantes.

De nuevo, el lugar más visitado ha sido el Palacio Real de Madrid, residencia oficial para ceremonias y actos solemnes de Estado, con 641.891 personas que han visitado este palacio madrileño de arquitectura clásica y barroca.

Le siguen otras visitas reales de importante patrimonio arquitectónico y cultural en Madrid, como el Real Sitio de San Lorenzo del Escorial, con 230.158; y el Real Sitio de Aranjuez, con 146.114; también destaca el Palacio Real de La Granja de Segovia, con 136.910.

Después, se sitúa el Valle de los Caídos, en Madrid, con 114.755; y los Palacios Reales de La Almudaina, en las Islas Baleares, con 46.252; el de Riofrío, en Segovia, con 22.839; y el de El Pardo, en Madrid, con 21.969.

Finalmente, se encuentran los Monasterios de San Jerónimo de Yuste, con 41.468; el de Santa María la Real de Las Huelgas, con 27.309; el de Las Descalzas Reales, con 25.489; el de Santa Clara de Tordesillas, con 11.945; y el de La Encarnación, con 7.419 visitantes.

Los monumentos de Patrimonio Nacional que han experimentado un mayor incremento en visitas han sido El Palacio Real de Madrid, con un aumento de 86.541 personas (15,58%), y el Real Sitio de La Granja, con un incremento de 33.114 (26,15%), debido al creciente interés que despiertan las fuentes históricas en funcionamiento.

La exposición “El Retrato en las Colecciones Reales. De Juan de Flandes a Antonio López”, abierta desde el 4 de diciembre de 2014 hasta el 31 de mayo de 2015, ha sido la más visitada desde que se inició el programa de exposiciones temporales en el año 2000, con un total de 260.420 visitantes.